jueves, 9 de noviembre de 2006

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Destino.


Que me perdonne el mayor de los Infinitos... (¿existe otra traducción mejor para Endless?) pero yo no creo mucho en él, o en su libro.


¿Que está todo escrito? ¿Que todo está ahí? ¿Que cada acto nuestro esta determinado? Perdonenme, pero YO, el ser humano llamado Jorge Pardo y autoproclamado como ser virtual llamado Gatoapilas, no puedo creer que las cosas sean de ESA manera.
¿La razón?

Creer algo así anula toda esperanza en el libre albedrío. Limita al ser humano a ser un títere de fuerzas que no entiende, y nos quita toda opción de creer que podemos cambiar las cosas si ponemos el esfuerzo suficiente en ello. ¿Para que esforzarse si todo está escrito? ¿Para que siquiera intentar algo si estamos destinados a que pase o a que no pase? No puedo creer en el destino entonces como una cosa inerte, que nos limita y que pone sobre nosotros pesadas cadenas que no nos damos cuenta que arrastramos (si se fijan en el dibujo Destino está encadenado a su libro)


Otra forma de creer en el destino es como algo más dinámico, una suerte de cosas que suceden cuando te pones en movimiento. Es decir, como vi en una película (no sé pero estoy seguro que era una comedia romántica) y como repiten mucha gente amiga: "Puede que el destino te lleve a algo, pero una vez que estás ahí la decisión depende de tí". Esto implica que claro, hay un mínimo de cosas que están destinadas a nosotros, hay una parte de nuestras historias personales que ya existe en algún lado, pero como no sabemos cual de todas las cosas que nos pasan o nos podrían pasar está destinada a nosotros nos obliga a ponernos en movimiento para encontrar aquello que queremos, y pone la decisión en nuestras manos al momento de los Qui'ubo. Pero eso sginifica que hay una fuerza (o alguien o algo) que nos domina de todas maneras, que rige nuestras vidas y nos lleva hacia un lado u otro, y a nosotros nos corresponde elegir si nos gusta o no adonde estas fuerzas nos llevan. Creo que dentro de algunas religiones (como la Católica mal entendida) esto se refleja en un Dios paternal que nos lleva de la mano mientras nosotros solo le decimos que juguetes queremos para nosotros, así si algo malo nos pasa siempre fue culpa del papá que nos llevó ahí, y si lo hicimos bien fuimos nosotros, y si salió bien a pesar de todas las expectativas negativas o por imposible que pareciera fue entonces papá que nos dió en el gusto. Esto es injusto, dentro de mi sistema de creencias, injusto para nosotros en nuestro rol de entes individuales e injusto para Dios, como ser de infinito Amor.

y mi interpretación favorita es que no existe algo como el destino inmutable... existen Probabilidades, algunas dadas por donde naciste, por donde viviste, por quienes se juntan contigo, por un montón de cosas; algunas metafísicas, otras espirituales, pero lo más importante DINÁMICAS!!! las probabilidades se crean a cada momento, con cada decisión que tomamos, por pequeña o insignificante que sea, se modifican con cada acto conciente o inconciente que realizamos y hacen que ciertos actos futuros sean más probables para nosotros, como también es más probable que nos pasen ciertas cosas dado el hecho de que hoy hicimos o dejamos de hacer cosas. Lo mas choro de las probabilidades es que son influenciadas tanto por lo que hacemos o dejamos de hacer, y tambien por lo que otra gente alrededor del mundo hace o deja de hacer, el hecho es que cada influencia tiene un valor, pequeño o grande dependiendo de lo que estén influenciando. Así que puede que lo que haga un Chino hoy no me inlfuencie, pero si ese chino esta trabajando en la producción de un producto que luego yo compraré en Chilito en virtud del tratado de libre comercio con China, entonces las decisiones que él tome PUEDEN influenciarme. Entonces Destino es para mi un conjunto de probabilidades dadas por la resolución de probabilidades anteriores (actos que hayamos hecho) mas la interacción con TODAS las probabilidades de TODA la gente en el mundo... por tanto se hace complejo.
¿Por que es esta mi decisión?

Por un simple hecho: no puedo dejar de creer que tenemos SIEMPRE responsabilidad de nuestros actos, de lo que hacemos y lo que dejamos de hacer. Y esa responsabilidad, esos actos nos llevan a lo que buscamos. Por eso es que debemos ser bien concientes de nuestras decisiones puestas que todas nos llevan algun lado, como un paso más que nos acerca a aquello que sin darnos cuenta buscamos.

Por eso mismo OJO CON LA MENTE!!! ojo con lo que decidimos, con lo que decimos, con lo que hacemos o dejamos de hacer, porque todo aquello nos inlfuenciará en un futuro, o influenciará a otros. Puede sonar a mucha responsabilidad, pero creo que como seres individuales y concientes la responsabilidad por nuestros actos, o sea el LIBRE albedrio, es el mayor regalo que Dios nos dió, pero como todo poder, también da no-poder.
No quiero que alguien se escape por el chorro, ya que la gente que tiende a exagerar cualquier cosa que lee anda por todos lados, no quiero que sean tan horriblemente autoconcientes que no se dejen gozar la vida por lo que pueda pasarles o pasarle a otros por lo que deciden, no podemos saber como influenciará, además que nosotros no somos los que manejamos los calculos divinos para preveer el resultado de cada acción que emprendemos. Pero si podemos detenernos a pensar un poco más antes de actuar, solo para no dañarnos ni dañar a otros. Cuesta, pero tambén es parte de gozar la vida.

un abrazo apretado, ya que me extendí musho

y recuerden

OJO CON LA MENTE!!


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