viernes, 7 de septiembre de 2007

Rebeldías y Rebeldacos

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¿Que tiene que ver el Simpático Pedro Picapiedra con los tipos puntudos y rudos de al lado? Pues casí nada, excepto que el mgnífico genio de la edad de Piedradura creó el término que le da título a esta columnilla. siga leyendo y vea si hay relación

A fuego quedó marcado en mi mente aquel capítulo donde Pedro Picapiedra cantraba una desafinada melodía (The Humming Bird) para su amádisima Vilma, y al abandonarla era encontrada y recuperada por unos adolescentes que lo hacían automáticamente su ídolo y su modelo a seguir. En el tope de su carrera Pedro decía la frase que jamás olvidaré: "Mira Vilma, como me adoran y siguen estos rebeldacos" (parece que la olvidé por que no era tan así =P). Después de años de comerme el seso con esos 10 segundos televisivos pude entender que con Rebeldacos Pedro Picapiedra estaba menospreciando la condición de "siempre rebeldes" de la juventud, no contento con ese demoledor guiño el guionista dedicó todo esa capítulo a mostrar a los adolescentes como rebeldes superficiales que cambian de gusto apenas su ídolo no es quien parecía ser. De hecho, pedrito y su fama eran abandonados ante el rumor de que era un descuadrado y que no sabía de música.
Y que tiene que ver esto con los Punks? preguntará el inteligente lector, pues musho o poco. El Punk y los punks son el símbolo de la rebeldía como manera de vida desde que aparecieron alla por finales de los '70 criticando a la sociedad y al show business al que pertenecían la mayoría de los músicos de la epoca. Pero que pasa con la rebeldía? siendo una condición típica de los adolescentes y algo mas o menos visto como bueno por la historia del Pequeño David rebelde,bueno y lleno de sueños de una sociedad más justa, que combate contra el gigantesco Goliat corporativo y burgués que tiene las riendas de esta sociedad injusta, una historia que se replica hasta el infinito y más allá. O sea no pasaría nada con la rebeldía si esta fuera una cosa que tuviera efectos o una información que la hiciera mas dirigida y eficaz.
No es que me caigan mal los punks o los rebeldes en general, Yo también fuí un rebelde y es bueno no aceptar borregamente todo lo que nos vende "el sisteeeema" (pronuncie esto con voz caprina o como un balido), pero cuando la rebeldía es precisamente lo que el sistema te vende ahí entramos en conflicto. Pues es esto lo que pasa con los autodenominados Punkies actuales, solo escuchan la música, se identifican con ella y dale que suene alegando todo el día sobre weas que no entienden y que menos hacen algo por cambiar. ¿No al servicio militar obligatorio? Pero si es una oportunidad de ponerse en buen estado físico, además de saber cosas que pueden servirte para defenderte; está bien ser no violento, pero si no quieres quemarte aprende a usar el fuego, no a jugar con él, además los militares están lejos de ser holgazanes inútiles que ganan plata haciendo nada ¿y las misiones de paz? y cuando queda un desastre ¿Quienes son los que andan de rescate y andan haciendo hoyos y levantando puentes mecano? Mi misión acá no es hacer una apología de los milicos que también tienen sus weas malas, pero por lo menos quiero aportar otra faceta del asunto.
El párrafo anterior solo quería aportar un ejemplo de lo falso y mal informado que se está volviendo el ser rebelde hoy día, son rebeldes con causa, pero con una causa mal entendida. Ahora, yendo al punto de ser efectivo ¿Han conseguido algo? en más de 35 años de movimiento Punk ¿Ha cambiado algo el sistema? pues, no. Parece que más bien estos Punkies fueron absorvidos y digeridos por el sistema, los que quedaron fuera poco o nada pueden hacer por que las cosas cambien de como están. Algunos protestaron por la contaminación, pues miren como estamos con la mierda al cuello y esperando el calientamiento global, sentados y sin hacer nada aún por salvarnos como especie.
Y ahí si que hay una causa, creo que más que alegar por que tal o cual pais tiene armas o por que hay que o no hacer el servicio militar, peleemos DIA a DIA desde nuestras casas, apagando luces que no necesitamos, desconectando la música que gasta electricidad, separando la basura y tantas cosas más que TAMBIÉN son una rebeldía, pero una rebeldia de hechos no de palabras y música de octavas y quintas.

Ojo con la mente!











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